El ser humano necesita poder tener todo controlado, clasificado y etiquetado, siempre queremos conocer qué es cada cosa y quién es cada uno.Y eso no siempre es malo, sí que lo es cuando, en base a esas etiquetas, empezamos a discriminar, despreciar o ningunear a otras personas.
Nuestro idioma está lleno de adjetivos que nos sirven para clasificar todo lo clasificable, desde sus cualidades físicas: guapo, feo, alto, bajo; a sus cualidades morales: bueno, malo, avaro, rastrero. Nacen términos para señalar las clases según las ideas políticas, religiosas o las que sean: comunistas, fascistas, hinduistas, troskistas, legalistas, conservacionistas, ecologistas, negacionistas y todos los -istas que se puedan imaginar hoy surge la palbra DISLEXIA
¡Uf! suena complicado. Pero la palabra existe. Es el término para definir las dificultades que tienen muchos niños, y también algunos ‘grandes’, para aprender a leer o a escribir bien. enmi caso me ha afecatodo en escribir como es mas rapida mi mente que la escritura que es mas lenta pero en ello he encotrado que escribiendo me ha echo superar el problema,, esta enfermedad un niño lee la palabra lobo’ en lugar de ‘bolo’, por citar sólo un ejemplo.
Y no se sabe con exactitud por qué, pero en la vida real muchos padecemos esa extraña anomalía de la mente, que en últimas no es otra cosa que ver lo que no es.
Nos ocurre cuando no aprendemos a leer las palabras con las cuales redactamos los argumentos de nuestras vidas. Por alguna sutil peculiaridad nos bloqueamos y no tenemos una percepción clara de las cosas que nos ocurren gracias a DIOS por saber que el poder de el lo hecho posible que en mi ultimo examen que me hiseron hase 13 años habia superado y pude probar que DIOS es mas grande que mi deficiencia en la escritura mi MADRE ella me ayudo en lo maximo ella me dijo AGLAEN yo le llamaria flojerexia porque solo debes de tomar tu tiempo para escribir y lo aras bien y es verdad solo nescitamos mas tiempo para escribir un parafo que una persona normal que no cambia las letras de secuencia.,
A quienes somos ‘disléxicos’, nos sucede lo mismo que a los niños que padecen el mal: las letras que forman las palabras que vemos, parecen sufrir una maligna transposición.
Vemos, leemos, y al final entendemos muy mal el mensaje. Sólo que en el caso nuestro no son las palabras las que se traban, sino los hechos.
Somos los que invertimos el orden de las cosas y a veces llegamos a ver la vida al revés.
Mencionemos varios casos:
Si somos celosos, encontramos en todos aquellos que se les acercan a nuestras parejas, a supuestos amantes.
Si somos inseguros, vemos fantasmas en todos los rincones.
Si les tenemos miedo a los temblores, cualquier movi-miento, por muy sutil que sea, se convierte en un ‘terremoto’ que nos sacude el piso.
No se trata sólo de un defecto visual. La ‘dislexia espiritual’ de la que hablamos hoy, es más grave de lo que podría pensarse.
Si se tiene en cuenta que los ojos son las antorchas del pensamiento, no resulta difícil pensar que este defecto de la personalidad puede destruir una relación amorosa, puede flanquear el ánimo e incluso puede su-mergirnos en una profunda depresión.
Por eso, ponga los pies sobre la tierra.
¡No! no necesita ir a ningún especialista, ni tampoco debe leer mensajes de autoestima.
Lo que tiene que hacer es dejar de ser tan frío y calculador. No se meta tantas cucarachas en su cabeza.
Crea más en usted mismo y recuerde siempre que una mente tranquila, siempre genera poder.
UN EJEMPLO Dos noches distintas
Dos hombres estaban contando la noche que pasaron. El primero de ellos expresó así su experiencia:
“Anoche antes de acostarme escuché por la radio las últimas noticias y me llené la cabeza de preocupaciones, lo cual me hizo dar vueltas y vueltas en la cama.
El otro comentó: “Yo, me senté y leí unas líneas de las Sagradas Escrituras. No leí más de un versículo y ¿sabe una cosa? Me llene de bellos pensamientos y dormí de una manera plácida”.
Dos noches bien distintas. El uno alimentó la noche con ideas miedosas y deprimentes; mientras el otro se alimentó con los pensamientos de la confianza.
Y no se sabe con exactitud por qué, pero en la vida real muchos padecemos esa extraña anomalía de la mente, que en últimas no es otra cosa que ver lo que no es.
Nos ocurre cuando no aprendemos a leer las palabras con las cuales redactamos los argumentos de nuestras vidas. Por alguna sutil peculiaridad nos bloqueamos y no tenemos una percepción clara de las cosas que nos ocurren gracias a DIOS por saber que el poder de el lo hecho posible que en mi ultimo examen que me hiseron hase 13 años habia superado y pude probar que DIOS es mas grande que mi deficiencia en la escritura mi MADRE ella me ayudo en lo maximo ella me dijo AGLAEN yo le llamaria flojerexia porque solo debes de tomar tu tiempo para escribir y lo aras bien y es verdad solo nescitamos mas tiempo para escribir un parafo que una persona normal que no cambia las letras de secuencia.,
A quienes somos ‘disléxicos’, nos sucede lo mismo que a los niños que padecen el mal: las letras que forman las palabras que vemos, parecen sufrir una maligna transposición. Vemos, leemos, y al final entendemos muy mal el mensaje. Sólo que en el caso nuestro no son las palabras las que se traban, sino los hechos.
Somos los que invertimos el orden de las cosas y a veces llegamos a ver la vida al revés.
Mencionemos varios casos:
Si somos celosos, encontramos en todos aquellos que se les acercan a nuestras parejas, a supuestos amantes.
Si somos inseguros, vemos fantasmas en todos los rincones.
Si les tenemos miedo a los temblores, cualquier movi-miento, por muy sutil que sea, se convierte en un ‘terremoto’ que nos sacude el piso.
No se trata sólo de un defecto visual. La ‘dislexia espiritual’ de la que hablamos hoy, es más grave de lo que podría pensarse.
Si se tiene en cuenta que los ojos son las antorchas del pensamiento, no resulta difícil pensar que este defecto de la personalidad puede destruir una relación amorosa, puede flanquear el ánimo e incluso puede su-mergirnos en una profunda depresión.
Por eso, ponga los pies sobre la tierra.
¡No! no necesita ir a ningún especialista, ni tampoco debe leer mensajes de autoestima.
Lo que tiene que hacer es dejar de ser tan frío y calculador. No se meta tantas cucarachas en su cabeza.
Crea más en usted mismo y recuerde siempre que una mente tranquila, siempre genera poder.
UN EJEMPLO Dos noches distintas
Dos hombres estaban contando la noche que pasaron. El primero de ellos expresó así su experiencia:
“Anoche antes de acostarme escuché por la radio las últimas noticias y me llené la cabeza de preocupaciones, lo cual me hizo dar vueltas y vueltas en la cama.
El otro comentó: “Yo, me senté y leí unas líneas de las Sagradas Escrituras. No leí más de un versículo y ¿sabe una cosa? Me llene de bellos pensamientos y dormí de una manera plácida”.
Dos noches bien distintas. El uno alimentó la noche con ideas miedosas y deprimentes; mientras el otro se alimentó con los pensamientos de la confianza.
EN muchas ocaiones me he preguntado porque a ami ¡Dislexia! y en ello he encotrado sabias palbra de aliento de DIOS Mi corazón desborda de palabras sabias, mis labios dirán la pura verdad. A mí me hizo el soplo de Dios, el aliento del Todopoderoso me dio la vida job 33 3,4Algunos solamente creen que Dios existe, pero ellos no tienen una relación personal con El. Quizás ellos donan dinero a una iglesia, participan en ceremonias religiosas, o hasen ritualmente, pero ellos nuncan han encontrado el amor personal de Dios¡ Cuán preciosos me son, oh Dios, tus pensamientos! ¡Cuán grande es la suma de ellos! Si los enumerara, serían más que la arena. Despierto, y aún estoy contigo.Salmos 139:17-18
Echad sobre El toda vuestra ansiedad porque El tiene cuidado de vosotros. 1Pedro 5:7
Echad sobre El toda vuestra ansiedad porque El tiene cuidado de vosotros. 1Pedro 5:7
les amo qdtbmmmmmmmmm recuerdame soy solo AGALEN
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